lunes, 6 de junio de 2011

Ni Persefone ni Persefona: yo quiero ser perroflauta

Me he leido -saltandome trozos, la verdad- "Las diosas de cada mujer" de Jean Shinoda. Es un libro que habia visto recomendado en varios sitios, pero tengo que decir que no me ha convencido. A mitad lectura, me di cuenta de que empezaba a recordarme las generalidades que lees cuando lees un horoscopo. Se supone que de las divinidades femeninas, hay una predominante en cada mujer, correspondiente a un arquetipo. Pero puede haber una principal y otra secundaria. O varias que se combinan a partes iguales. O incluso ir cambiando segun el entorno social, la familia, etc. Vamos que es igual que cuando dices "pues yo soy horoscopo patatín y no tengo nada de pataton" y alguien que 'entiende' de estas cosas te contesta "eso es porqur tienes el ascendente (¿ascendiente?) en la luna (en mi caso la luna de Valencia, of course)
En fin, que respetos al maximo pero que a mi no me ha gustado.
El viernes por la tarde me compré unas sandalias finas-hippies y por supuesto meidisinespein. Y el sabado por la mañana, dando un paseito por una feria de comercio justo... me dió el subidón de perriflautismo. Yo no soy Atenea, ni Hera, ni Demeter... yo quiero ser una biologa peluscona que nunca se pinta las uñas, que le da teta al niño cuando está cerca de cumplir los dos años, que odia hacerse mechas, que jamas tuvo ilusion por casarse de blanco y por la iglesia, que se emocina mas ante la hoja de un arbol que ante un monovolumen, en fin, tanto es asi la cosa que estoy seriamente considerando hacerme vegetariana, y aunque soy realista y se que es algo que no puedo hacer de hoy para mañana, si que al menos, puedo ir dando pasos, como por ej pasar de comprar huevos de gallinas torturadas a huevos de gallinas libres. Guardar el aceite usado y llevarlo un punto limpio (no, no lo hacia). Esta semana, de momento, hemos instaurado la semana de las noches vegetarianas y cada noche haremos un plato diferente, incluyendo huevos y algun lacteo, eso si. Ahí fuera está el chorizo ibérico y el jamón, lo se, lo se, pero Zamora no se hizo en una hora. A leer.

4 comentarios:

  1. jejeje, mola eso de ser perroflauta! nosotros tambien comemos huevos de gallinas libres y cositas ecológicas!

    ResponderEliminar
  2. yo también tengo mi ramalazo, lo sé, sobre todo en verano cuando salimos con los perros y la furgo... ahora, el vegetarianismo... no puedo, con lo me gusta a mí un filete!

    ResponderEliminar
  3. Pues yo no soy capaz de renunciar a la proteína animal, y menos aún a la grasa del chorizo y el jamón.....
    Soy omnívora y no renuncio a nada.

    ResponderEliminar
  4. Acabo de descubrir tu blog, muy divertido! me encanta como escribes. :) Sobre este post, sólo un par de comentarios como lectora y como vegetariana. Primero que aunque decidieras ser ovolacto-vegetariana -entiendo que aun no lo eres- no significa que tengas que comer huevos o lácteos en cada comida. Hay muchos platos 100% vegetales de lo más completos y ricos, luego te puedes hacer aparte un huevo frito (por decir algo) o no... o comerlo otro día. :) Esto te lo comento por una mera cuestión práctica, pues sé que hay gente que piensa de esa manera (huevos en lácteos en cada comida) y eso sólo hacer ver la dieta vegetariana como más complicada y difícil de lo que en realidad es. Pero bueno, pasa igual con la dieta "omnívora": un plato principal sin carne o pescado no es plato, y es una pena porque acabamos comiendo más proteínas y grasas animales de las que necesitamos con sus consecuencias para la salud (sin hablar del medioambiente)

    Eso por un lado, y por otro, que muchos nos hemos hecho vegetarianos de un día para otro, no es nada difícil con la motivación (sobretodo) e información (poco a poco) adecuadas. Claro que cuando cocinas para otros, en tu caso nené y padre del nené, que no son ni quieren ser vegetarianos, la cosa se complica, sí, jeje. Ese caso específico daría para una parga charla. Pero en fin, ánimo si sigues en el empeño. Besosss

    ResponderEliminar